La utilización de dinamita para la construcción del muro fronterizo en los estados de Arizona y Nuevo México, podría impactar de manera negativa al entorno natural de la frontera.
De acuerdo a la sección mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos (CILA), las explosiones que se usan por dicho material de trabajo implica un análisis de los daños que pudieran provocarse, dentro de una zona donde un escarpado terreno alberga al jaguar, y que además, no registra el paso de tráfico humano, de armas o de drogas. Además, las explosiones también pueden afectar a los monumentos que delimitan la misma frontera.
“Para verificar que esta actividad no impacta los monumentos internacionales de la Línea Divisoria Internacional, y que los escurrimientos transfronterizos no provocan afectaciones en territorio mexicano; en caso de que así suceda se notificará de inmediato a nuestra Cancillería“.
Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos (CILA)
El análisis sigue siendo coordinado por ambos lados de la frontera.